Bienvenidos a nuestros paseos-

"Este blog pretende ser el mosaico en el cual se plasmen, en imágenes, esos momenticos de los que intentamos disfrutar cada semana siempre y cuando las obligaciones familiares nos lo permitan. No buscamos grandes hitos, ni grandes hazañas, lo único que perseguimos es disfrutar, unas horas a la semana, de los regalos que nos proporciona la madre naturaleza. Esto nos sirve para cargar las pilas para comenzar una nueva semana. ¿Qué mas podemos pedir?"
Esperemos que os gusten las imágenes que recogemos en nuestros paseos y si os animáis a hacer alguno de ellos, encontraréis, en cada reportaje un enlace que os llevará a la ruta que previamente hemos descargado en Wikiloc.

jueves, 21 de abril de 2016

Córdoba I.


Duración.- 1 hora y 10 minutos.
Desnivel acumulado.- 34 metros.

Muy pocas ciudades en el mundo tienen la riqueza histórica y cultural que posee Córdoba. Desde sus orígenes romanos, fue territorio visigodo y asentamiento judío antes de pasar a ser capital del califato  hasta la época actual del cristianismo... Córdoba fue y sigue siendo en la actualidad un claro ejemplo de convivencia multicultural en donde conviven diferentes etnias fruto de su dilatada historia labrada a partir de diferentes culturas, diferentes religiones y diferentes civilizaciones. Sus muros tienen el honor de albergar el nacimiento del pensador romano Séneca, de engalanarse con el esplendor de ser capital del califato omeya y de acoger a personajes tan ilustres como Maimonides, máximo exponente filosófico y defensor de la convivencia y de la tolerancia.

Toda esta mezcolanza la disfrutamos cuando paseamos por sus blancas calles. Unas culturas que han sabido ensamblarse entre ellas dotando al paseo de una armonía y belleza difícil de explicar. Córdoba te invita desde el primer instante a deambular por sus calles, a perderse en el laberinto de encrucijadas del barrio judío, te invita a pasear por el barrio del Alcazar Viejo contemplando sus coloridos patios y aspirando la fragancia que desprenden sus flores, te empuja a rodear los muros de su mezquita mezclado entre una marabunta que con paso cansino contempla, asombrada, la grandeza de semejante obra arquitectónica, te sugiere acercarte hasta las cuadras de las Caballerizas Reales para disfrutar de la fortaleza y de la agilidad del caballo andaluz... y después de todo eso... te obliga a reponer fuerzas degustando un sabroso salmorejo cordobés o un suculento rabo de toro mientras nos refrescamos con un Montilla Moriles. Sin lugar a dudas Córdoba enamora.


Powered by Wikiloc


Para descargar esta ruta o ver más detalles, pincha aquí.

Amanece desde el puente romano sobre las aguas del río Guadalquivir. Puente fue construido en el S.I, su longitud es de 33 metros y posee 16 arcos.
En el extremo izquierdo del puente está situada la llamada Torre de Calahorra. Esta torre, de origen islámico, tenía como función ser la entrada y proporcionar protección al puente romano.
Alrededor del puente se encuentra una reserva natural llamada "Sotos de Albolafia" en donde residen y anidan gran cantidad de aves a las cuales podemos observar desde lo alto del puente.
Conforme pasan los minutos el cielo cambia de color ...
... mientras contemplamos la escultura de San Rafael, obra realizada en 1.651 por Bernabé Gonzalez del Río, considerado el "custodio" de la ciudad.
Abandonamos el puente y nos dirigimos al molino de Albolafia o de Kulaib. Fechado en época romana fue Abd al-Rahman II, cuarto emir del califato, el que mandó construir la rueda hidráulica con el fin de llevar el agua del río hasta el palacio de los emires situados en el Alcázar. Como anécdota diremos que la reina Isabel la Católica, posteriormente, mandó desmontar la rueda ya que el chirriar de sus movimientos impedían el sueño de la monarca.
Una vez visitado la zona del Guadalquivir, nos adentramos en Córdoba por la Puerta del Puente, mandada construir en 1.571 y terminada cinco años más tarde, que era el lugar de entrada a la ciudad.
Pasamos por debajo de la Puerta...
... y nos introducimos en un casco urbano...
... que nos encandilará desde el primer instante. Sus casas completamente encaladas, sus macetas perfectamente alineadas...
... sus escaleras cuidadosamente cuidadas harán de este paseo una auténtica delicia para nuestros sentidos. 
Templo romano. Construido en el S.I originariamente era un edificio de mármol blanco a estilo del templo de Apolo Palatino en Roma. El conjunto lo completaba, aunque estos edificios no han perdurado hasta nuestros tiempos, un circo y una plaza.


Una vez visitado el templo, nos dirigimos hacia la plaza de la Corredera y lo hacemos contemplando...
... los preciosos patios de las viviendas de esta zona. Estos patios, con el paso de los años, se convirtieron en el alma de la vivienda. En el centro normalmente encontramos una fuente y en ocasiones un pozo que servía para recoger el agua de la lluvia. La cultura musulmana añadió la entrada a la vivienda desde la calle por medio de un zaguán y la ornamentación mediante elementos vegetales con el fin de aumentar la sensación de frescor.
Aquí podemos observar uno de los dos tipos de patios con los que nos podemos encontrar. Se trata de una casa unifamiliar en donde las estancias se distribuyen alrededor de un patio enclaustrado y suelo enlosado. También los podemos encontrar de mosaico empedrado.
Maravillándonos de la belleza de los patios y paseando por estrechas calles llegamos a...
... la plaza de la Corredera.
Construida en el S.XII parece ser que en este lugar estuvo enclavado el circo romano. Su actual disposición rectangular la hace singular ya que es la única Plaza Mayor rectangular de Andalucía.
En esta plaza antiguamente se organizaron festejos taurinos, de ahí viene su nombre, además de utilizarse para numerosos eventos como autos de fe, pregones y lugar de ejecuciones durante la invasión francesa.
Uno de los edificios que conforman la plaza es la llamada "casa de  Dª Ana Jacinto". Se diferencia claramente de las demás por su fisonomía ya que está compuesta por un gran número de pequeñas ventanas especialmente dispuestas para ser alquiladas con motivo de los numerosos festejos taurinos que en esta plaza se celebraban.
Abandonamos la plaza por uno de sus laterales y nos dirigimos a...
... la Plaza del Potro. Tradicionalmente lugar de compra-venta de ganado esta plaza se caracteriza por la presencia de una fuente renacentista cuyo elemento decorativo es la presencia de un potro.
En la plaza del Potro encontraremos el Museo de Bellas Artes...
... así como la "Posada del Potro". Esta vivienda refleja un tipo de construcción del S.XV denominada "corral". 
Los corrales se caracterizaban por estar constituidos por una serie de viviendas que tenían un patio común empedrado, a diferencia de los que hemos visto antes, que estaba presidido por un pozo.
Esta posada fue citada por Miguel Cervantes en "El Quijote" por lo que se cree que de niño fue huésped de este lugar.
Volvemos a callejear por un laberinto de bellas edificaciones...
... sin dejar ocasión de asomarnos entre la forja de las puertas...
... para contemplar el colorido de los patios...
... hasta llegar al monumento del Triunfo de San Rafael. Desde este punto...
... cogemos esta calle cuyos naranjos, situados a ambos lados de la carretera, nos embriagan con el olor a azahar...
... camino de las Caballerizas Reales. Este edificio, mandado construir en 1.570 por Felipe II, ocupa lo que antaño eran las antiguas caballerizas de la época califal. Cabe resaltar, por su importancia, que este lugar es considerado como el origen de la raza del caballo andaluz ya que el rey Felipe II mandó agrupar, en este sitio, a los mejores sementales y yeguas de todas las provincias que bordeaban el Guadalquivir.
En el interior del edificio se puede presenciar un espectáculo de doma en el cual quedaremos realmente impresionados de la belleza de esta raza de equinos.
El caballo andaluz es un caballo ibérico de tipo barroco, caballos robustos pero ágiles, que descienden de los caballos de combate. Su pelaje es variado, no pudiendo ser nunca pío, siendo el más común el tordo.
Abandonamos el recinto de las caballerizas, después de habernos quedado atónitos con semejante belleza de caballos, y nos dirigimos hacia el barrio de San Basilio en donde nos encontramos con esta curiosa escultura en homenaje a los cuidadores de los patios.
Detalle.
Aunque el sol en estos días no aprieta, la ciudad se va preparando para lo que se le avecina...
... así como engalana sus balcones para la "Fiesta de las flores" que se celebra el próximo mes de mayo.
Pasamos junto al Alcazar de Córdoba, construido en 1.328 fue residencia de los Reyes Católicos. En sus dependencias Cristobal Colón solicitó fondos a los monarcas para su aventura marina, corría el año 1.486.
Del Alcázar nos dirigimos al barrio de la Judería.  Barrio en donde antiguamente vivían los judíos y que esta conformado por un enjambre de estrechas callejuelas, todas perfectamente encaladas, y que tiene su centro neurálgico...
... en la plaza de Maimonides en donde se encuentra el museo taurino.
Curiosamente la escultura en honor a este médico y filósofo cordobés no está situada en la plaza que lleva su nombre sino que está enclavada en la plaza Tiberiades. Maimonides era una persona empeñada en la búsqueda de la verdad, a través del conocimiento, que quería encontrar el sentido de la vida para hacer mejor a la raza humana. No creía en credos pues pensaba que el fanatismo anula la libertad de pensamiento y de acción. Pregonaba así pues el respeto hacia el prójimo que tanta falta nos hace en estos tiempos que corren.
Cerca de la escultura de Maimonides nos encontramos con el zoco municipal. Uno de los elementos más significativos del urbanismo de las ciudades islámicas es la presencia de un zoco. Este en concreto se ubica en una casa solariega de reminiscencia mudéjar del S.VI. En su interior hay tiendas y talleres de artesanía cordobesa...
... y un patio rodeado de edificaciones de dos alturas.
Para finalizar nuestro paseo nos dirigimos hacia el edificio más emblemático de la ciudad, su Mezquita.
La Mezquita de Córdoba es considerada como el monumento más importante del islam en occidente y uno de los elementos constructivos más asombrosos del mundo, es patrimonio de la Humanidad desde 1.984. Su dilatada historia supone un compendio de diferentes estilos tales como el visigodo, el omeya, el gótico, el renacentista y el barroco.
Lo primero que se observa cuando se aproxima a ella es su torre-campanario. Se trata de un alminar construido en época de Abd al-Rahman III, en el siglo X, que sustituía a otro más antiguo. Ha sido restaurado en numerosas ocasiones y al final ha llegado hasta nuestros días como una torre de estilo barroco.

Justo debajo de la torre nos encontramos con la "Puerta del Perdón".  Puerta de estilo mudéjar, ha sufrido alguna que otra modificación. Posee arco de herradura y encima de éste podemos observar tres barquillos polilobulados con pinturas en su interior.
Detalle del arco de herradura...
... y detalle de las laminas de bronce que conforman la puerta.
"Puerta de los Visires". Era la puerta por la que se accedía al oratorio de la mezquita de Abd al-Rahman I. Está compuesta por un vano adintelado sobre el que hay un arco de herradura ciego.
Detalle.
Puerta de ampliación de Al-Hakam II. Esta puerta resalta por la belleza de su composición que se basa en un arco de herradura sobre el que figuran un conjunto de arquillos entrelazados también de herradura. A ambos lados de la puerta podemos ver ventanas  sobre las que se sitúan arcos polilobulados con una marcada decoración geométrica.
Detalle.
"Virgen de los faroles" situada en el muro exterior de la Mezquita. 
Una vez contemplado el muro exterior, nos introducimos en el interior y lo primero que encontramos es el Patio de los Naranjos. Originariamente era el patio de las abluciones de la mezquita de Abd al-Rahman I. Recibe su nombre actual por los 18 naranjos que alberga y que fueron plantados en el S.VIII.
Situadas en las galerías que rodean al patio están expuestas las vigas y tablones del artesonado original del templo...
... y también podemos contemplar la presencia de algunas fuentes. Esta que nos ocupa es la fuente de Santa María. Fuente barroca del S.XVII. Uno de sus caños es conocido como "Caño del olivo" al albergar junto a él un olivo milenario. Esta fuente sirvió de inspiración a Azorín.
Interior de la Mezquita. Una vez que introducido en ella una sensación de grandeza, asombro y admiración se apodera del visitante. Al hacerlo, nos recibe un enjambre de 1.300 columnas, perfectamente alineadas, de mármol, granito y jaspe que se sustentan en 365 arcos de herraduras bicolores formadas por ladrillo rojo y caliza amarilla.. Para hacernos idea de sus dimensiones deberemos de tener en cuenta que en su interior, al acabar la última ampliación, 45.000 almas rendían culto siendo, en aquellos tiempos, la segunda mezquita más grande del mundo. Cabe destacar que el mihrab, lugar santo que señala la qibia, se encuentra orientado hacia el Sur y no hacia la Meca. Esto se debe a que Abd al-Rahman II siguió los patronos de la Gran Mezquita de Damasco que está orientada en la misma dirección.

No hay comentarios:

Publicar un comentario